Es de la ciudad de Belén.
Lucía
Margarita Yapura de Lera, quien vive junto con su hijo Oscar, de 30
años, viene solicitando un lugar donde vivir dignamente. Actualmente
reside en un lugar cedido por su hija, que consiste en una habitación,
donde duerme junto a su hijo, un baño muy precario y una cocina debajo
de un árbol con una mesa.
No tiene ningún beneficio social, provincial, ni nacional, sólo sobrevive con lo que recauda de la venta callejera de sandwiches, panchos, choripanes y manzanas dulces. Su hijo recicla lo que junta de los basurales, y lo pone a nuevo para poder venderlo, y así lograr unos pesos más.
En diálogo con LA UNION, Lucía afirmó: “Estoy pidiendo un terreno para vivir dignamente. Desde gestiones anteriores y la actual municipal y la actual Gobernadora, a quien le entregué en sus manos una nota sobre mi situación, estoy esperando una respuesta”.
Además, comentó: “Mi vida es una lucha. Mi hijo Oscar me ayuda un poco juntando fierros o algún material que él recicla para venderlo y así ingresar unos pesos más a la casa. Nosotros trabajamos en la calle todos los días vendiendo choripán, manzanas dulces, pochoclos, panchos”.
También dijo que le prometieron un plan a través de Desarrollo Social, para ayudarlos con herramientas, pero aún no se concretó esa promesa.
“Tengo 57 años y estoy esperando la donación de un terreno nada más, eso pido, yo con mi sacrificio levantareé las paredes de mi hogar. Si no tengo respuesta comenzaré a hacer una huelga de hambre y una demanda judicial por abandono de persona, estoy decidida a todo”, sentenció.
Y agregó: “Mi vieja camioneta es mi hogar, la calle mi mundo, mis compañeros de la vida mi hijo, mi perro y un loro, juntos salimos a pelear la vida. Todos nos conocen, jamas molesté a nadie por nada, lo único que pido es la donacion de un terreno donde pueda vivir feliz y dignamente”.
No tiene ningún beneficio social, provincial, ni nacional, sólo sobrevive con lo que recauda de la venta callejera de sandwiches, panchos, choripanes y manzanas dulces. Su hijo recicla lo que junta de los basurales, y lo pone a nuevo para poder venderlo, y así lograr unos pesos más.
En diálogo con LA UNION, Lucía afirmó: “Estoy pidiendo un terreno para vivir dignamente. Desde gestiones anteriores y la actual municipal y la actual Gobernadora, a quien le entregué en sus manos una nota sobre mi situación, estoy esperando una respuesta”.
Además, comentó: “Mi vida es una lucha. Mi hijo Oscar me ayuda un poco juntando fierros o algún material que él recicla para venderlo y así ingresar unos pesos más a la casa. Nosotros trabajamos en la calle todos los días vendiendo choripán, manzanas dulces, pochoclos, panchos”.
También dijo que le prometieron un plan a través de Desarrollo Social, para ayudarlos con herramientas, pero aún no se concretó esa promesa.
“Tengo 57 años y estoy esperando la donación de un terreno nada más, eso pido, yo con mi sacrificio levantareé las paredes de mi hogar. Si no tengo respuesta comenzaré a hacer una huelga de hambre y una demanda judicial por abandono de persona, estoy decidida a todo”, sentenció.
Y agregó: “Mi vieja camioneta es mi hogar, la calle mi mundo, mis compañeros de la vida mi hijo, mi perro y un loro, juntos salimos a pelear la vida. Todos nos conocen, jamas molesté a nadie por nada, lo único que pido es la donacion de un terreno donde pueda vivir feliz y dignamente”.
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