Declararon familiares de las víctimas del terrorismo de Estado
Fue el testimonio más conmovedor. Jorge Ripoll pidió declarar y negó su participacion en los secuestros.
Ayer se desarrolló la segunda audiencia del tercer juicio por
delitos de lesa humanidad que se concreta en la provincia. Los imputados
por los delitos de asociación ilícita y privación ilegítima de la
libertad son los militares retirados Darío Otero Arán, Enrique Henzi
Basso, Jorge Isaac Ripoll, Carlos Ricardo Ruiz y Roberto Sergio Mujica.
Esta vez declararon familiares de los desaparecidos Nelly Yolanda
Borda, los hermanos Francisco y Griselda Ponce y Julio Burgos y
relataron el terror que vivieron durante la época del terrorismo de
Estado. Ripoll, quien se negó a declarar el viernes pasado, pidió la
palabra y al igual que sus pares, Ruiz y Mujica, negó haber participado
de los hechos.
Ripoll pidió declarar exclusivamente sobre el día en que le
comunicaron que debía presentarse a declarar como imputado en la causa y
que supuestamente fue asistido por un abogado que no estaba habilitado
para litigar en el fuero Federal y sobre el sobreseimiento por falta de
mérito que logró en aquel momento y que luego fue revocado.
En este contexto negó haber estado en funciones el 27 de enero de 1977 durante la desaparición de Borda.
Posterior a su relato, los jueces escucharon el relato de 7
testigos, entre los que se destacaron los testimonios de Fresia Borda,
hermana de Nelly Yolanda, y los de Lucía Ponce y Noemí Toledo, sobrinas
de Francisco y Griselda Ponce y primas de Julio Burgos.
Fresia, con 68 años, fue la primera en hablar. La mujer relató cómo
un grupo de militares se llevaron a su hermana de su casa ubicada en
Belén la madrugada del 27 de enero de 1977. "Cuando lo militares se
fueron dejaron al pueblo sumido en el terror”, manifestó. La mujer
explicó que su padre buscó a su hija por todo el país y envió cartas
tanto a la iglesia como a policías y militares, pero nunca le
respondieron dónde estaba. Por testimonios de un tercero, quien habría
estado detenido con Yolanda en Tucumán, es que supieron que ella habría
estado allí, pero nunca la volvieron a ver. Según aseguró, pudo
enterarse que el operativo estuvo a cargo de Henzi Basso.
Ponce y Toledo, en tanto, se refirieron a la noche del 15 de
diciembre, cuando Griselda y Julio desaparecieron de su vivienda ubicada
sobre calle 9 de Julio de esta ciudad Capital. Tras relatar la tortuosa
noche en que se los llevaron, agregaron que a la mañana siguiente, más
militares llegaron a su casa y además de llevarse elementos que nunca
les devolvieron, armaron una hoguera en el patio de su casa con los
libros de la biblioteca. De ese procedimiento participó Mujica. En
tanto, explicaron que durante varios meses personal no identificado
hacía "guardia” en la esquina de su casa. Toledo, por su parte, aseguró
que cuando comenzó la investigación de estos hechos en 2009 recibió
amenazas: "Si seguís jodiendo con esto más vale que te vayas de
Catamarca”, le dijeron.
También declararon Segundo Ortiz, quien vio que Griselda estaba
detenida en la División de Investigaciones. Jorge Contreras, que era
médico del ejército y participó del procedimiento que aterrorizó a
Belén. Aníbal Salas, que realizó el servicio militar en el Regimiento de
infantería aerotransportada de Catamarca y Fermín Aredes.
El debate continuará el próximo viernes.
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