Juicio por el crimen de las barrancas
Bajo presión. Graves acusaciones de la testigo Claudia Aguiar.
La hija del imputado Julio Aguiar declaró por más de una hora y media ante los integrantes del Tribunal de la Cámara Penal de Primera Nominación. Claudia (19) estuvo junto a su padre en el momento que hallaron el cadáver de Lorenzo Américo Saracho.
Al tratarse de un familiar directo, la joven solamente podía declarar a favor del imputado. Bajo esa condición, Aguiar expresó con lujo de detalles desde los días previos al descubrimiento del cuerpo sin vida de su tío.
La mujer explicó que había acompañado a su padre hasta Las Barrancas, en donde tenían su domicilio, ya que querían saber como se encontraban Saracho y su tía, Cruz del Milagro Aguiar.
Cuatro días antes del crimen -ocurrido el 9 de junio de 2009- "Lachi" Saracho cuidaba a Milagro, quien padece una discapacidad.
Luego de arribar desde Belén, la joven contó que al estacionar el Fiat 147 en la cochera de su vivienda, su tía los estaba esperando y que notó preocupación en su rostro. Habría intentado decirles algo, pero no lograron entenderle, por lo que ingresaron al inmueble junto a su padre y se dieron con el macabro hallazgo.
Acto seguido comentó que avisaron en Belén, en la comisaría, lo ocurrido.
Durante un segmento de su declaración, Aguiar contó que cuando se le tomó declaración por primera vez fue presionada por policías y hasta mencionó que fue víctima de amenazas por parte del fiscal de Belén, Jorge Flores. No obstante, nunca radicó denuncia por los episodios mencionados.
Al tratarse de un familiar directo, la joven solamente podía declarar a favor del imputado. Bajo esa condición, Aguiar expresó con lujo de detalles desde los días previos al descubrimiento del cuerpo sin vida de su tío.
La mujer explicó que había acompañado a su padre hasta Las Barrancas, en donde tenían su domicilio, ya que querían saber como se encontraban Saracho y su tía, Cruz del Milagro Aguiar.
Cuatro días antes del crimen -ocurrido el 9 de junio de 2009- "Lachi" Saracho cuidaba a Milagro, quien padece una discapacidad.
Luego de arribar desde Belén, la joven contó que al estacionar el Fiat 147 en la cochera de su vivienda, su tía los estaba esperando y que notó preocupación en su rostro. Habría intentado decirles algo, pero no lograron entenderle, por lo que ingresaron al inmueble junto a su padre y se dieron con el macabro hallazgo.
Acto seguido comentó que avisaron en Belén, en la comisaría, lo ocurrido.
Durante un segmento de su declaración, Aguiar contó que cuando se le tomó declaración por primera vez fue presionada por policías y hasta mencionó que fue víctima de amenazas por parte del fiscal de Belén, Jorge Flores. No obstante, nunca radicó denuncia por los episodios mencionados.
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