Si se hubiera aprobado el presupuesto nacional en el que se habían logrado incluir obras para Catamarca
La aprobación de la ley de leyes fracasó por falta de quórum. Entre los ausentes hubo dos diputados locales. La Provincia decidió ejecutar las obras con fondos propios.
Constancia. Corpacci gestionó el presupuesto para las obras. |
El dique El Shincal, la segunda etapa del acueducto Pirquitas-Capital y el sistema de cloacas para Valle Viejo y FME, obras millonarias que están en proceso licitatorio y en el caso de las cloacas ya en ejecución con fondos provinciales, podrían haber sido ejecutadas con fondos nacionales e internacionales, lo que le habría significado a la Provincia un ahorro de más de 150 millones de pesos.
Como señaló el Ejecutivo Provincial como principal argumento para avanzar en su concreción con fondos propios, es cierto que las tres integraban el lote de obras hídricas postuladas y aprobadas para obtener financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo y que, desde hace varios años esperaban que Nación diera el aval final para su concreción.
También es cierto que las tres obras no habían sido incluidas originariamente con asignación presupuestaria en el proyecto de presupuesto nacional 2011. De hecho, el subsecretario del Agua y El Ambiente, Oscar Doering, salió a lamentarlo a través de los medios el 28 de octubre pasado.
Sin embargo, tal como consta en documentación a la que El Ancasti pudo acceder, la senadora nacional Lucía Corpacci realizó formalmente el pedido de incorporación de estas obras al presidente de la comisión de presupuesto del Senado, Eric Calcagno, el 21 de octubre de 2010 (ver facsímile). Calcagno, a su vez, giró el pedido a la comisión que analizaba el presupuesto en Diputados y, finalmente, las obras fueron incorporadas con financiamiento propio en el presupuesto 2011. Por caso, según consta en las planillas presupuestarias anexas, el Ministerio de Planificación era el organismo al que le imputaron las partidas. El dique El Shincal, por caso, tenía 18 millones de pesos asignados para 2011, 18 millones para 2012 y 24 millones para 2013.
Para el acueducto Pirquitas Capital, segunda etapa, la partida que se pretendía habilitar para 2011 era de 19 millones de pesos y para 2012, igual monto. Y, en el caso del dique El Shincal, hubiese podido obtener un presupuesto de 16,5 millones para 2011, un monto idéntico para 2012 y 22 millones en 2013.
¿Por qué motivo tales obras no serán financiadas con aportes nacionales e internacionales? Simplemente porque la ley de leyes no fue aprobada por los diputados de la Nación. De hecho, dos de los diputados catamarqueños representantes de la UCR, Pedro Molas y Mariana Veaute, no estuvieron en ninguna de las dos sesiones en las que se intentó aprobar el presupuesto. En la sesión del 11 de noviembre, Molas estuvo ausente y Veaute no se quedó en el recinto. Y en la sesión del 17 de noviembre, último intento para aprobar la norma, los legisladores tampoco dieron quórum. Sí estuvieron María Julia Acosta y Dalmacio Mera por el FV y Raúl Paroli, por el FCS. Pero los números no alcanzaron y el tratamiento del proyecto fracasó. Al justificar su ausencia en el recinto, Molas y Veaute mencionaron las obras que esperaba Catamarca y que, entendían, no habían sido incluidas en el presupuesto.
Con ese mismo argumento -de la falta de financiamiento nacional para obras hídricas comprometidas para Catamarca- el Gobierno de la Provincia avanzó en los procesos licitatorios de dichas obras.
En diciembre, en un acto que fue el puntapié inicial de la campaña, el Gobernador firmó el decreto de convocatoria a licitación de la segunda etapa del acueducto Pirquitas-Capital (con un presupuesto de $42 millones) y anunció el inicio, por administración, de las cloacas para Valle Viejo y FME ($50 millones). Poco después, con la campaña avanzada, anunció la licitación del dique El Shincal, con 60 millones de presupuesto.
Lo paradójico es que tampoco el Gobierno Provincial había incluido en su presupuesto partidas para estas obras hídricas millonarias, tema que ya genera preocupación -tal como lo reflejó ayer este diario- en el gobierno entrante.
Como señaló el Ejecutivo Provincial como principal argumento para avanzar en su concreción con fondos propios, es cierto que las tres integraban el lote de obras hídricas postuladas y aprobadas para obtener financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo y que, desde hace varios años esperaban que Nación diera el aval final para su concreción.
También es cierto que las tres obras no habían sido incluidas originariamente con asignación presupuestaria en el proyecto de presupuesto nacional 2011. De hecho, el subsecretario del Agua y El Ambiente, Oscar Doering, salió a lamentarlo a través de los medios el 28 de octubre pasado.
Sin embargo, tal como consta en documentación a la que El Ancasti pudo acceder, la senadora nacional Lucía Corpacci realizó formalmente el pedido de incorporación de estas obras al presidente de la comisión de presupuesto del Senado, Eric Calcagno, el 21 de octubre de 2010 (ver facsímile). Calcagno, a su vez, giró el pedido a la comisión que analizaba el presupuesto en Diputados y, finalmente, las obras fueron incorporadas con financiamiento propio en el presupuesto 2011. Por caso, según consta en las planillas presupuestarias anexas, el Ministerio de Planificación era el organismo al que le imputaron las partidas. El dique El Shincal, por caso, tenía 18 millones de pesos asignados para 2011, 18 millones para 2012 y 24 millones para 2013.
Para el acueducto Pirquitas Capital, segunda etapa, la partida que se pretendía habilitar para 2011 era de 19 millones de pesos y para 2012, igual monto. Y, en el caso del dique El Shincal, hubiese podido obtener un presupuesto de 16,5 millones para 2011, un monto idéntico para 2012 y 22 millones en 2013.
¿Por qué motivo tales obras no serán financiadas con aportes nacionales e internacionales? Simplemente porque la ley de leyes no fue aprobada por los diputados de la Nación. De hecho, dos de los diputados catamarqueños representantes de la UCR, Pedro Molas y Mariana Veaute, no estuvieron en ninguna de las dos sesiones en las que se intentó aprobar el presupuesto. En la sesión del 11 de noviembre, Molas estuvo ausente y Veaute no se quedó en el recinto. Y en la sesión del 17 de noviembre, último intento para aprobar la norma, los legisladores tampoco dieron quórum. Sí estuvieron María Julia Acosta y Dalmacio Mera por el FV y Raúl Paroli, por el FCS. Pero los números no alcanzaron y el tratamiento del proyecto fracasó. Al justificar su ausencia en el recinto, Molas y Veaute mencionaron las obras que esperaba Catamarca y que, entendían, no habían sido incluidas en el presupuesto.
Con ese mismo argumento -de la falta de financiamiento nacional para obras hídricas comprometidas para Catamarca- el Gobierno de la Provincia avanzó en los procesos licitatorios de dichas obras.
En diciembre, en un acto que fue el puntapié inicial de la campaña, el Gobernador firmó el decreto de convocatoria a licitación de la segunda etapa del acueducto Pirquitas-Capital (con un presupuesto de $42 millones) y anunció el inicio, por administración, de las cloacas para Valle Viejo y FME ($50 millones). Poco después, con la campaña avanzada, anunció la licitación del dique El Shincal, con 60 millones de presupuesto.
Lo paradójico es que tampoco el Gobierno Provincial había incluido en su presupuesto partidas para estas obras hídricas millonarias, tema que ya genera preocupación -tal como lo reflejó ayer este diario- en el gobierno entrante.
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