Por supuesta malversación de los recursos de la minería, varios intendentes están en la mira de la Justicia
Andalgalá. Es la comuna que más dinero recibió. La Justicia investiga el uso que el intendente Perea (foto) hizo de las regalías.
Casi 400 millones, exactamente 393,2 millones de pesos, recibieron los municipios de la provincia desde 2004 hasta el tercer trimestre de 2010, producto de la distribución de las regalías mineras.
Dentro de ese esquema de coparticipación de las regalías, resultaron más beneficiadas las comunas que pertenecen a departamentos mineros: Andalgalá y Belén en primer término, pero también Antofagasta de la Sierra y Santa María. Estas cuatro jurisdicciones se quedaron con el 72,9% de las regalías liquidadas hasta ahora, que suman 286.747.552 pesos.
Sin embargo, como una paradoja del destino, esos fondos millonarios generaron bastantes complicaciones a los intendentes, encargados de administrarlas. Es que coincide que las municipalidades que más dinero recibieron en concepto de regalías, son las que más problemas acarrean con la Justicia o con el mismo Tribunal de Cuentas.
Así, por caso, Andalgalá que desde 2004 recibió 94 millones de regalías mineras tiene causas pendientes de investigación en la Justicia –denunciadas por concejales y ex concejales- y también informes lapidarios de parte del TC, que objetaban el procedimiento seguido para invertir el dinero y, en otros casos, hasta las obras mismas. Por caso, ya en 2008, funcionarios de la comuna admitieron que se habían gastado los 60 millones que habían recibido hasta ese momento, pese a que muchas de las obras anunciadas no estaban concluidas o ni siquiera iniciadas. De hecho, se considera que gran parte del descontento social antiminero en esa ciudad, obedece a la mala inversión de los recursos de la minería.
El fiscal de Belén, Jorge Flores, que además entiende en las causas originadas en Antofagasta de la Sierra, ya imputó al intendente de Antofagasta, Carlos Fabián en varias causas en las que se investiga el uso dado a las regalías mineras. En una de ellas, por ejemplo, decidió poner el dinero de las regalías en plazo fijo, apropiándose para otros fines “no habilitados por ley” el dinero de los intereses que generaba la maniobra financiera.
También la intendenta de La Puerta de Corral Quemado, en el norte de Belén, María Cristina Quipildor, está en la mira de la Justicia y ya pesa sobre ella una imputación por malgastar las regalías.
Tinogasta, municipio que recibió más de 4,6 millones de pesos de la minería, también tiene causas pendientes en la Justicia, que datan de cuando el ahora intendente electo, Hugo Ávila, fue intendente municipal. También tiene denuncias en su contra por el uso de las regalías mineras el intendente de Valle Viejo, Gustavo Roque Jalile.
Además de Jalile, el actual intendente tinogasteño, Simón Quintar, y el intendente de Belén, Daniel Ríos, admitieron haber usado "de forma transitoria" regalías para gastos corrientes o para equilibrar sus problemas financieros, algo que está prohibido por ley.
Como tal conducta se reiteró en contextos de escasez económicas en varios intendentes, el TC tuvo que sacar un dictamen prohibiendo el uso transitorio de las regalías que, según la ley 5.192, sólo pueden invertirse en "obras de infraestructura para el desarrollo económico y capacitación para actividades productivas".
Otro caso resonante y que, cada tanto, vuelve a ser noticia -como la semana pasada- por avances en la investigación o por nuevas causas elevadas a juicio es el del municipio de San José. De hecho, la jefa comunal Mónica Hernández –cuyo mandato caduca en diciembre- llegó a ser suspendida y hasta estuvo presa y prófuga a raíz de las sospechas de malversación de regalías que pesan en su contra. Su comuna recibió de 2004 hasta ahora 14,3 millones de pesos y ya hay ocho causas elevadas a juicio por las que, en algún momento, deberá responder la jefa comunal.
Antofagasta
Hasta 2010, recibió 14,3 millones. La intendenta, Mónica Hernández ya tiene 8 causas elevadas a juicio.
Dentro de ese esquema de coparticipación de las regalías, resultaron más beneficiadas las comunas que pertenecen a departamentos mineros: Andalgalá y Belén en primer término, pero también Antofagasta de la Sierra y Santa María. Estas cuatro jurisdicciones se quedaron con el 72,9% de las regalías liquidadas hasta ahora, que suman 286.747.552 pesos.
Sin embargo, como una paradoja del destino, esos fondos millonarios generaron bastantes complicaciones a los intendentes, encargados de administrarlas. Es que coincide que las municipalidades que más dinero recibieron en concepto de regalías, son las que más problemas acarrean con la Justicia o con el mismo Tribunal de Cuentas.
Así, por caso, Andalgalá que desde 2004 recibió 94 millones de regalías mineras tiene causas pendientes de investigación en la Justicia –denunciadas por concejales y ex concejales- y también informes lapidarios de parte del TC, que objetaban el procedimiento seguido para invertir el dinero y, en otros casos, hasta las obras mismas. Por caso, ya en 2008, funcionarios de la comuna admitieron que se habían gastado los 60 millones que habían recibido hasta ese momento, pese a que muchas de las obras anunciadas no estaban concluidas o ni siquiera iniciadas. De hecho, se considera que gran parte del descontento social antiminero en esa ciudad, obedece a la mala inversión de los recursos de la minería.
El fiscal de Belén, Jorge Flores, que además entiende en las causas originadas en Antofagasta de la Sierra, ya imputó al intendente de Antofagasta, Carlos Fabián en varias causas en las que se investiga el uso dado a las regalías mineras. En una de ellas, por ejemplo, decidió poner el dinero de las regalías en plazo fijo, apropiándose para otros fines “no habilitados por ley” el dinero de los intereses que generaba la maniobra financiera.
También la intendenta de La Puerta de Corral Quemado, en el norte de Belén, María Cristina Quipildor, está en la mira de la Justicia y ya pesa sobre ella una imputación por malgastar las regalías.
Tinogasta, municipio que recibió más de 4,6 millones de pesos de la minería, también tiene causas pendientes en la Justicia, que datan de cuando el ahora intendente electo, Hugo Ávila, fue intendente municipal. También tiene denuncias en su contra por el uso de las regalías mineras el intendente de Valle Viejo, Gustavo Roque Jalile.
Además de Jalile, el actual intendente tinogasteño, Simón Quintar, y el intendente de Belén, Daniel Ríos, admitieron haber usado "de forma transitoria" regalías para gastos corrientes o para equilibrar sus problemas financieros, algo que está prohibido por ley.
Como tal conducta se reiteró en contextos de escasez económicas en varios intendentes, el TC tuvo que sacar un dictamen prohibiendo el uso transitorio de las regalías que, según la ley 5.192, sólo pueden invertirse en "obras de infraestructura para el desarrollo económico y capacitación para actividades productivas".
Otro caso resonante y que, cada tanto, vuelve a ser noticia -como la semana pasada- por avances en la investigación o por nuevas causas elevadas a juicio es el del municipio de San José. De hecho, la jefa comunal Mónica Hernández –cuyo mandato caduca en diciembre- llegó a ser suspendida y hasta estuvo presa y prófuga a raíz de las sospechas de malversación de regalías que pesan en su contra. Su comuna recibió de 2004 hasta ahora 14,3 millones de pesos y ya hay ocho causas elevadas a juicio por las que, en algún momento, deberá responder la jefa comunal.
Antofagasta
Recibió 14,6 millones. Su intendente, Carlos Fabián ya está imputado en varias causas por el uso de las regalías
San JoséHasta 2010, recibió 14,3 millones. La intendenta, Mónica Hernández ya tiene 8 causas elevadas a juicio.
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