Se trata de un anticuerpo que disuelve la grasa de las arterias.
La acumulación de grasa en las arterias provoca un estrechamiento y la reducción del flujo de oxigeno al corazón, lo que puede conducir a un infarto. En la actualidad, las estrategias de prevención de ateroesclerosis están basadas en combatir los factores de riesgo, como los niveles altos de colesterol, el control de la presión arterial y glucosa en la sangre, publicó el portal británico Bbc.co.uk.
Jan Nilsson, quien está a cargo de una de las investigaciones, detalló que las pruebas demostraron que la inyección puede alterar la forma en que el sistema inmune reacciona a los depósitos de grasas. "Los tratamientos actuales sólo reducen en 40% el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Las personas que pueden sufrir un infarto al miocardio, probablemente, sean los primeros en probar el medicamento", opinó.
La vacuna fue el resultado de un trabajo conjunto que llevaron a cabo expertos de Suecia y de Estados Unidos, y fue presentada en la conferencia Fronteras en Biología Cardiovascular, organizada por la Sociedad Europea de Cardiología, en Londres.
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