A pesar del pedido de la defensa del cura Juan de Dios Gutiérrez de sobreseimiento de la causa, la Cámara de Apelaciones no hizo lugar al pedido.
De esta manera, y tras la decisión del tribunal, el sacerdote seguirá imputado por el delito de abuso sexual simple agravado por tratarse del encargado de la educación y guarda de la víctima.
La defensa del cura había solicitado el sobreseimiento asegurando que "se trató de un enamoramiento” de la jovencita.
Los hechos habrían ocurrido en la ciudad de Belén, donde el cura llevaba adelante un grupo parroquial del que tomaba parte la adolescente denunciante.
En octubre de 2015, la madre de la adolescente denunció al cura porque su hija había sido víctima de abusos sexuales, hechos que se habrían desatado desde diciembre de 2014.
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