La madre de una adolescente de 14 años, de quien se reservan todos los datos personales para resguardar a la jovencita, se presentó en la mañana de ayer, en la Comisaría departamental de Belén y denunció a su expareja, padre biológico de la adolescente, por supuesto delito de abuso sexual. La Justicia activó el protocolo de abuso en la víctima y aguardaba contar con el resultado de este para actuar en contra del sindicado, quien se encuentra separado desde el mes de julio del año pasado de su madre. De acuerdo a la información policial y judicial a la que tuvo acceso LA UNIÓN, en horas de la mañana, una mujer de 36 años se apersonó en la guardia de la dependencia acompañada por su hija de 14 años y manifestaron su intención de realizar una denuncia.
Fue entonces cuando la madre de la jovencita les contó que, horas antes, encontrándose junto a su hija en el domicilio donde ambas conviven, esta se acercó a donde ella estaba y comenzó a llorar. Sin entender qué le pasaba, la mujer la tranquilizó y, al preguntarle qué le sucedía, su hija le confesó que su padre biológico, la persona que se supone tenía que cuidarla y velar por su seguridad, la abusaba sexualmente.
En el relato, la adolescente le dijo a su mamá que desde hacía varios años atrás estaba siendo víctima de estos ultrajes y que aquellos habían ocurrido todos en la vivienda donde convivían cada vez que ella, es decir la madre, se ausentaba de la casa por algún motivo. Estos momentos a solas en los que la mujer dejaba a su hija al cuidado de su padre, el sujeto aprovechaba para someterla sexualmente.
Asimismo, le contó que nunca antes se había animado a decirle las cosas que le hacía su papá desde chica porque este la había amenazado con matarla a ella y a su mamá. Amenazas que la llevaron a soportar por año los abusos y callar.
Además, contó que se animó a decirle ahora porque el sujeto ya no vive con ellas y porque lo habría visto recientemente y este habría intentado abusar de ella nuevamente.
Tras escuchar el relato de la mujer y la adolescente, desde la policía se puso de inmediato en conocimiento de la situación a la fiscal de Belén, quien dispuso que a la adolescente se le practicra el protocolo de abuso sexual y se le brindara la asistencia profesional necesaria.
Por el momento, desde la Justicia no se ordenó ninguna medida contra la libertad personal de su padre, encontrándose al aguardo del resultado del protocolo.
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