SE AGUARDA UNA AUDIENCIA CLAVE EN APELACIONES
La Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos y la Asamblea Ni Una Menos Catamarca motorizaron la campaña "El dolor no prescribe". El sacerdote está imputado por abusos sexuales.
La causa contra el sacerdote Moisés Pachado tendrá un nuevo capítulo en las próximas semanas, ya que en la Cámara de Apelaciones se resolverá si se hace lugar al planteo de prescripción o si se lo rechaza, y el proceso judicial continúa.
En ese sentido, la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos movilizó la campaña #ElDolorNoPrescribe, que tuvo eco en la Asamblea Ni Una Menos Catamarca que desde ayer acompañó la iniciativa.
"El dolor de una niña abusada a los 9 años NO PRESCRIBE!!! Éste es el segundo intento del cura abusador Moisés Pachado y su defensa de escapar de la JUSTICIA. Acá estamos!!! NO A LA PRESCRIPCIÓN", reza la publicación.
La causa se encuentra en la Cámara de Apelaciones y días atrás se conoció que el Tribunal que estará en la audiencia estará compuesto por el camarista Edgardo Álvarez y estará acompañado por los subrogantes Mauricio Navarro Foressi y César Marcelo Soria. Será la segunda vez que el expediente llega al Tribunal de Alzada, ya que en septiembre del año pasado se había rechazado el pedido de prescripción bajo el fundamento de que Pachado aún no había sido imputado y no se podía analizar si correspondía el archivo de la denuncia.
Las actuaciones regresaron a la Fiscalía de la Tercera Circunscripción Judicial de Belén y al mes siguiente el fiscal Jorge Flores acusó a Pachado por dos abusos sexuales, ocurridos entre 1997 y 2000.
El abogado defensor de Pachado, Roberto Mazzucco, insistió con el pedido de prescripción pero el juez de Control de Garantías, Oreste Miguel Piovano, rechazó la solicitud argumentando que el abuso sexual infantil es imprescriptible e hizo referencia a la Convención Internacional de los Derechos del Niño, que tiene rango constitucional. La defensa apeló la resolución.
Pachado fue denunciado en diciembre de 2018 por una joven, quien señaló que había sido sometida sexualmente en dos oportunidades cuando aquél era sacerdote en Hualfín, departamento Belén. Según la denuncia, el religioso era una persona de confianza en su familia.
El caso se había conocido primero por la denuncia pública realizada por la damnificada en su cuenta de Facebook, en la que destapó los aberrantes hechos sufridos en su infancia.
Cronología
Diciembre de 2018: la víctima viajó a Belén y denunció los abusos sexuales en la Fiscalía de esa localidad. Relató que había sido sometida por Pachado entre 1997 y 2000 cuando era sacerdote en Hualfín.
Enero de 2019: la defensa de Pachado planteó la prescripción y el archivo de la denuncia. El juzgado de Control de Garantías de Belén lo rechazó bajo el argumento de que no había imputación para estimar si es que los hechos estaban prescriptos.
Septiembre de 2019: la Cámara de Apelaciones rechazó el pedido con igual fundamento que el juzgado belicho.
Octubre de 2019: el fiscal Jorge Flores imputó a Pachado de dos hechos de abuso sexual. La defensa insistió con la prescripción pero el Juzgado de Control de Garantías entendió que el abuso sexual infantil es imprescriptible. Se basó en la Convención Internacional de los Derechos del Niño.
Enero de 2020: El Obispado anunció la creación de una comisión que investigaría los abusos sexuales cometidos por integrantes del clero. La querella pidió informes pero no tuvo respuestas.
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