LA HISTORIA DEL DÍA
Hay pedacitos de patria aislados en todas partes de nuestro país. Un caso concreto es el de la Escuela N° 474 El Toral.
Ubicada en el Noroeste de Belén, no tiene un camino para llegar, solo se accede caminando 12 horas o haciendo 9 a lomo de mula.
Los docentes trabajan 25 días corridos y se vuelven una semana a sus hogares.
La escuelita de aquel hermoso y recóndito paraje belicho, funciona desde 1936. La zona tiene una comunidad de 80 habitantes.
Por aquellas cuestiones de la globalización, una de sus docentes creó una página en Facebook (click aquí) de la institución educativa y desde allí muestra una realidad que conmueve hasta al más duro.
Así pudimos conocer cómo por la falta de camino, aunque recibieron una donación de mobiliario y materiales para la escuela, fue fundamental el corazón y la solidaridad de los papás de la comunidad, quienes tuvieron que preparar las cargas y a sus animales para la complicada tarea.
“Los papás bajan en los burros para llevar a la escuela. Tienen tanta destreza para preparar las cargas que es admirable, duele el corazón ver tanto sacrificio, pero para Dios nada es imposible y algún día tendrán el camino que por tantos años han soñado”, publicaron ayer en la cuenta de Facebook, con las imágenes que aquí reproducimos.
Se puede ver cómo la travesía inició de día y culminó sin la luz del sol. Así como los padres de la pequeña comunidad tuvieron este gesto, también están retratados en fotos levantando los cimientos de un jardín de infantes y realizando otras obras para que sus hijos puedan disfrutar y aprender.
El Tolar, un pedacito de paraíso que necesita de la ayuda de todos.
Tomado de diario El Esquiu
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