El cura Juan de Dios Gutiérrez, un paso más cerca de llegar a juicio

 El cura Juan de Dios Gutiérrez se encuentra más cerca de llegar al debate oral por la grave acusación de abuso sexual que pesa en su contra, ya que la Corte de Justicia local rechazó el pedido de casación de la defensa del religioso, por lo que ahora solo le queda la instancia del Recurso Extraordinario Federal.

Silvia Barrientos, abogada representante de la familia de la presunta víctima, explicó que “en el caso de que la defensa quiera apelar este fallo, solo le queda el recurso extraordinario federal. En el segundo punto del fallo, la Corte dice que no hace lugar al recurso de casación, y en el cuarto, especifica que ‘téngase presente la reserva del caso federal’, lo que significa que solamente les queda presentar este recurso, para lo que tienen 10 días hábiles. Veremos si lo presentan, en el caso de que no lo hagan, ya queda para el debate”.

La abogada indicó que son optimistas en cuanto a la respuesta de la Corte. “Pensamos que van a presentar este recurso federal en función de dilatar más la situación, pero este ya es un paso importante para nosotros”, consideró.

Cabe mencionar que la defensa del sacerdote Juan de Dios Gutiérrez, acusado por “abuso sexual con acceso carnal agravado por ser ministro de un culto religioso” en perjuicio de una jovencita menor de edad, recurrió a distintos recursos y apelaciones desde el momento de la imputación para evitar que el cura se siente en el banquillo de los acusados. 

Acusación

Es importante recordar que a finales de octubre de 2015, la madre de la adolescente de 16 años, de la ciudad de Belén, denunció a Gutiérrez por abusar de su hija, tras descubrir en la computadora de la niña, quien padecía graves problemas nerviosos, que el religioso mantenía diálogos sexuales inapropiados con la niña.

El cura en ese entonces tenía 28 años y la jovencita tan solo 16 y de las pruebas se desprendió que habría manipulado psicológicamente a la presunta víctima hasta un punto extremo, ya que debió ser hospitalizada en total estado de crisis. 
El religioso fue imputado tras una corta detención, pero la causa sufrió decenas de idas y vueltas en ámbitos judiciales por las constantes casaciones y recursos presentados por la defensa del sacerdote, ya que los informes psicológicos y psiquiátricos señalaron a Gutiérrez como un “manipulador al punto de destruir la subjetividad del otro” (la jovencita).

La familia entera de la adolescente tuvo que hacer un cambio radical de vida ante este suceso, porque lejos de ser apoyados en su lugar de origen, recibieron numerosas muestras de repudio por haber denunciado al cura. Al día de hoy, la joven se encuentra con un intenso tratamiento psicológico.