jueves, 30 de mayo de 2019

Docentes de Belén reclaman el pago de sus sueldos


LO BUENO, LO MALO Y LO FEO


Señor Director:
Somos docentes belichos con un grave problema, que esperamos pueda solucionarse; pero más allá de esto pretendemos que esta situación cambie por nuestra dignidad como trabajadores y personas.
Muchos de nosotros hace más de 9 meses no podemos percibir nuestros haberes que con grandes expectativas y emoción esperamos, luego de que el año pasado optamos horas en distintas asambleas de opción de cargos realizadas en la Escuela Secundaria Nº 18 (cabecera). Algunos hemos renunciado a otros trabajos u horas para conseguir mayor estabilidad laboral o tal vez mejorar nuestra calidad de vida.
Hicimos horas en muchos espacios curriculares en diferentes escuelas dentro de la ciudad de Belén, pero alejadas del radio urbano, o en escuelas secundarias del norte, lo que obviamente genera en estos casos mayores gastos de traslado.
Realizamos los papeles correspondientes para que cada institución pueda enviarlos a Recursos Humanos y así cada profesor tenga su número de expediente para poder seguirlo. Algunos profesores buscaron gestores, otros decidieron seguirlo en forma personal debido a su situación económica.
Así comenzó nuestro calvario. De la alegría por optar horas y mejorar nuestras vidas a estar más endeudados, con una gran incertidumbre sobre cuándo cobraremos.
Cada mes fue una esperanza, pero charlando con otros profes tuvimos respuestas como: “Yo tardé en cobrar más de 1 año y todavía sigo esperando que me paguen la deuda (2 años)”; “en Recursos Humanos hay más de 1.000 expedientes para cobrar, tienen que tener paciencia”; “las veces que fui y las respuestas fueron que vuelva la semana que viene”; y así numerosos comentarios que se fueron transformando en realidad.
Lo triste es que ya lo asumimos como algo natural, es decir, muchos docentes no ven mal tener que esperar meses para cobrar, creen y lo ven como un ahorro a largo plazo.
Pero no es así, nos deben pagar por lo trabajado, como cualquier empleado estatal o privado, “mes trabajado, mes cobrado”, eso es lo normal, eso es lo justo y así poder decidir cada uno si quiere ahorrar o no.
Nosotros ya asumimos la responsabilidad en nuestro trabajo, así que hay que cumplir como sea, llegar a nuestras escuelas como sea, el material y los recursos para las clases hay que tenerlos; a fin de año en todas las actividades finales (muestras, acto, medallas, reconocimiento), quienes se hacen cargo de toda la organización y gastos somos nosotros, “los profesores”.
¿Cómo el Ministerio de Educación pretende que estemos comprometidos con nuestro trabajo?
Nos descuentan si faltamos, nos exigen papeles, planificaciones, informes, muestras, capacitarnos y ellos no cumplen con lo básico e indispensable que es pagar un sueldo que muchas veces utilizamos para colaborar en las instituciones o simplemente cumplir con nuestras obligaciones.
Con esto no pretendemos decir que lo que ellos nos exigen como docentes esté mal, por el contrario, nos parece perfecto, esto nos permitirá ser mejores y responsables.
Ahora bien, ¿adónde se vio que un empleado de cualquier rubro deba esperar más de 6, 7, 8 meses y hasta más de un año para cobrar su sueldo?
¿Con qué ganas nos levantamos todos los días para ir a cada escuela a trabajar?
Más allá de la vocación que pudiéramos tener o no, todas las personas trabajan para cobrar, porque muchos tenemos familias, hijos, deudas, tarjetas de crédito, impuestos, que no te esperan ni fían. Muchos de nuestros hijos están en etapa escolar, se enferman o simplemente tienen que comer.
¿Por qué nosotros tenemos que privar a nuestros hijos de cosas porque sino no tendremos para cargar nafta al auto o moto para poder llegar a las escuelas del norte?
Apelamos a esta medida porque nadie nos escucha, vamos a ver nuestros expedientes y si tiene la suerte de que te puedan atender, nos volvemos con la desilusión de que nuestros papeles se encuentran en el mismo lugar, en Control de Gastos; ahí esperan 3 o 4 meses hasta que los empleados pueden revisarlos e informarnos si nos falta o algo está mal, y si fuese así tendremos que esperar unos meses más.
La excusa de los empleados es siempre la misma: “Somos pocos”, nos dicen. Si es así, ¿por qué no designan más gente en este sector?
¿O simplemente son a propósito estas demoras?
Tantas preguntas sin ninguna respuesta.
Quien sea responsable de este gran problema que se haga cargo del mal y falta de respeto hacia nosotros.
Por eso pedimos, exigimos, a los gremios (porque muchos de nosotros estamos afiliados) que no se trata solo de mejorar los sueldos sino la calidad de vida del docente, que se lo logra como mínimo cobrando de forma inmediata sus sueldos.
Pero especialmente al Gobierno, al señor ministro de Educación, a la señora Gobernadora, que vean lo que estamos pasando muchos docentes de la provincia. No es natural para nadie esperar tanto tiempo para cobrar por su trabajo.
¿Cómo nos sostenemos económicamente?
Basta de usarnos, basta de menospreciarnos, lo que están haciendo con nosotros es manosearnos y denigrarnos.
Hacemos esto público para que todos los ciudadanos sepan que hay miles de docentes que trabajamos sin cobrar durante meses y hasta años esperando que nos paguen sueldos y deudas que nunca son actualizadas. Esto no pasa solo en Belén sino en todos los departamentos, con las mismas historias, con la misma desesperación.
¡¡Debemos unirnos todos los docentes para que esto no siga ocurriendo, hoy nos está pasando a nosotros, mañana te puede pasar a vos!!
Stella M. Villanueva
DNI 31.586.326
Eva M. Roggio
DNI 21.859.849
Martín Carrizo
DNI 26.256.895
José A. Bambicha
DNI 25.191.968
Silvio L. Gutiérrez
DNI 25.896.595
Alfredo Escotorín
DNI 28.819.881
Lila Delgado
DNI 37.165.087
Hay más firmas
Fuente diario el Ancasti

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